M. en C. Patricia Villa Ayala / Esta dirección de correo electrónico está protegida contra spambots. Usted necesita tener Javascript activado para poder verla.
Dr. Federico Castrejón Ayala / Esta dirección de correo electrónico está protegida contra spambots. Usted necesita tener Javascript activado para poder verla.
M. en C. Elizabet Flores Moctezuma / Esta dirección de correo electrónico está protegida contra spambots. Usted necesita tener Javascript activado para poder verla.
Centro de Desarrollo de Productos Bióticos (CeProBi) -IPN
Archivo: Ecología
Toxotrypana curvicauda, es el nombre científico de la conocida comúnmente como ´mosca de la fruta de la papaya´. Pertenece a la familia Tephritidae, comúnmente son conocidas como “verdaderas moscas de la fruta” y esta familia forma parte de una de las de mayor importancia económica a nivel mundial por los hábitos alimenticios que tienen sus larvas.
Las hembras de esta especie depositan sus huevecillos en el interior de un fruto (generalmente papaya) y las larvas se alimentan de las semillas y de la pulpa del fruto, al terminar de desarrollarse por completo perforan el fruto y caen al suelo, en donde pupan, finalmente el adulto emerge para buscar pareja, aparearse e iniciar una nueva generación de insectos. Las hembras poseen un ovipositor recurvado y extremadamente largo (aproximadamente del mismo largo de su cuerpo que es de 1.5 cm a 2 cm aprox.) con el que inserta los huevecillos a la cavidad del fruto.
El macho libera una sustancia química llamada “feromona sexual” que le sirve para atraer a la hembra y copular. A esta mosca, los productores de papaya también la conocen como “la avispa de la papaya”, por su cuerpo parecido a una avispa del genero Polistes spp., por su patrón de manchas en el tórax y el largo ovipositor de la hembra que favorece a la confusión que es una avispa debido a que se cree que con el “pica” aunque es inofensiva.
Las hembras cuando están ovipositando son muy vulnerables, debido a que permanecen mucho tiempo en esta posición y los machos también ocupan un fruto por largos periodos, defendiéndolo de otros machos en espera de una hembra para cortejarla y copular, de esta manera pueden ser depredadas fácilmente por arañas y lagartijas que viven en el árbol de papaya entre las frutas o por aves, sin embargo, su mimetismo con una avispa pude ser un mecanismo de disuasión contra algunos depredadores.
A este insecto la encontramos restringido en sitios donde se encuentre su hospedero favorito que es la papaya o sus hospederos alternativos como el “bonete” o “cuaguayote”, árbol de la misma familia que la papaya, o el “talayote”, una enredadera de la familia asclepiadácea, ambos ampliamente distribuidos en zonas de selva baja caducifolia. Coincidentemente sus hospederos producen látex, lo cual nos habla de ciertos compuestos químicos en común que el insecto reconoce.
En T. curvicauda al igual que otros insectos de la misma familia el encuentro con su hospedero se lleva a cabo como resultado de la combinación de estímulos visuales (color, forma y tamaño del fruto) y químicos (olor del fruto y la feromona sexual producida por el macho). En resultados de algunos experimentos llevados acabo en CeProBi, para establecer el papel que tienen determinados estímulos visuales en la selección del fruto hospedero, se encontró que el estímulo más importante es el color verde lo cual es explicable debido a que el insecto oviposita cuando el fruto está inmaduro. Cuando se combinaron los factores visuales, el color verde y la forma esférica resultaron más importantes que el tamaño para la selección del hospedero. Los resultados obtenidos indican que el color es más importante que la forma y estos dos son más importantes que el tamaño en la selección de hospedero, por lo que permiten plantear la existencia de niveles diferentes de estimulación y respuesta para cada uno de los estímulos visuales estudiados.
En una jaula de campo donde realizamos un seguimiento individualizado de las actividades diarias y la distribución espacial de esta mosca entre plantas no hospederas y una hospedera. Registramos sus actividades diariamente y encontramos que el cortejo y la cópula ocurren solamente en la planta hospedera, además observamos un desplazamiento característico para machos y hembras hacia el hospedero de acuerdo con su edad. Los machos pasan significativamente más tiempo del día en el hospedero que las hembras y fueron observados más veces en el fruto del hospedero que en cualquier otra parte.
La información aquí proporcionada son solo algunos datos de estudios sobre este insecto, de varios trabajos que se han desarrollado y se siguen desarrollando en el Laboratorio de Ecología Química del Departamento de Interacciones planta insecto y que podrían utilizarse para hacer más eficientes los sistemas de trampeo que se emplean actualmente en el monitoreo y control de este insecto y para dar algunas recomendaciones a productores de papaya sobre el manejo del cultivo y del insecto.
La M. en C. Patricia Villa Ayala realizó sus estudios de Licenciatura en Biología en la Facultad de Ciencias Biológicas de la Universidad Autónoma del Estado de Morelos. Obtuvo el grado de maestra en Ciencias en Parasitología Animal en la Facultad de Ciencias Agropecuarias de la Universidad Autónoma del Estado de Morelos. Su línea de investigación es el comportamiento de insectos.
El Dr. Federico Castrejón Ayala realizó sus estudios de licenciatura en Biología en la Escuela Nacional de Ciencias Biológicas del Instituto Politécnico Nacional. Obtuvo el grado de Maestro en Ciencias en Entomología y Acarología en el Colegio de Postgraduados. Obtuvo El grado de Doctor en Ciencias en Ecología y Desarrollo Sustentable en el Colegio de la Frontera Sur. Su línea de investigación es el comportamiento y ecología química de insectos.
La M. en C. Hilda Elizabet Flores Moctezuma realizó sus estudios de Licenciatura en Biología en la Facultad de Ciencias Biológicas de la Universidad Autónoma del Estado de Morelos. Obtuvo el Grado de Maestro en Ciencias en Producción Agrícola en la Unidad Académica de Ciencias Agrícolas y Ambientales de la Universidad Autónoma de Guerrero. Sus campos de investigación y especialización son en Fitopatología. Participa y dirige desde 1998 Proyectos de Investigación del Instituto Politécnico Nacional y CONACYT.
Los tres profesores trabajan en el Centro de Desarrollo de Productos Bióticos del Instituto Politécnico Nacional en el Departamento de Interacciones planta-insecto.